A los nueve años, mi abuela materna decidió darme su ejemplar de Platero y yo, alegando (como siempre se hace con este librito) que me gustaría porque era «para niños». Yo, nada más comenzar a leer, comprendí que lo que tenía en mis manos no era «para niños». Dejé de leer y me propuse el reto de ir leyendo libros (no tenía hábito de lectura) hasta poder ir entendiendo libros cada vez más difíciles.
A través de este reto he ido creando en mí a una persona comprometida y trabajadora, a la vez que me ha permitido leer y conocer nuevos puntos de vista que me han permitido desarrollar una gran empatía y una escucha activa. También fue creando en mí la pasión por la escritura lo que me llevó a ser constante, organizada y ha desarrollar mi creatividad, además de iniciar mi interés por la corrección. Así fue como fui desarrollando, sin saberlo, mi pasión por la Filología Hispánica.
Al entrar en contacto con los diferentes ámbitos de la Filología, mi curiosidad y mis ganas de aprender se sintieron atraídas también por la traducción, la localización de videojuegos (adaptar un videojuego de un idioma a otro) y la edición; ramas en las que estoy empezando a formarme.
En el ámbito personal me considero una persona activa, con una mente abierta y dispuesta siempre a conocer nuevos ámbitos. Con todo esto puede verse que soy una persona polivalente, con ganas de aprender y trabajadora, que a pesar de no contar con experiencia, puede aportar mucho valor. Así que no lo dudes y contacta conmigo.
¡Síguenos!
Si quieres estar al tanto de nuestras novedades, síguenos en nuestras redes sociales.