Durante toda mi formación y a lo largo de mi desarrollo personal he tenido constantemente una gran inquietud acerca de las problemáticas que atañen a la sociedad y he sentido siempre la necesidad de aportar una mejora o una solución a las necesidades de la población.

Por ello tuve claro desde niña mi vocación por ayudar a las personas desde la educación para que se sientan incluidas en la sociedad. Y es por ello que me formé como Educadora Social, la carrera con la que había soñado.

La Educación Social me parece un imprescindible en este mundo de desigualdad y exclusión por lo que creo que mi labor es muy necesaria para conseguir una sociedad mejor. Me considero una persona muy capaz para desempeñar mi profesión, puesto que soy muy responsable y comprometida, a la vez que organizada, implicada, comunicativa y trabajadora, es decir, competencias esenciales para llevar a cabo este trabajo.

Hice mis prácticas en un centro de día para menores en situación de riesgo y esta es una experiencia de la que pude aprender y en la que me pude desenvolver como educadora social. Trabajé varias de las competencias que debe tener el profesional de la Educación social como la inteligencia emocional, la empatía, el trabajo en equipo, la cooperación o la coordinación, entre otras, gracias a la realización de tareas como el acompañamiento, el apoyo educativo, el seguimiento personal, social, formativo y familiar de los menores, la terapia con familias o la programación de actividades educativas.

Además, algo que también me han ayudado a crecer como persona es la experiencia laboral que he ido compatibilizando con mis estudios profesionales, ya que gracias a mis trabajos en la hostelería y en el cuidado para la infancia he podido adquirir habilidades como la escucha activa, la observación directa, la comunicación fluida o la planificación.

A día de hoy mi objetivo profesional es ejercer de educadora social, para lo que me he formado y lo que realmente me motiva y me ilusiona de cara a mi futuro laboral y personal. Tengo una gran predisposición tanto para el trabajo como para la formación y me siento con muchas ganas de aprender y desarrollarme en el ámbito social.