Tras formarme como maestra, me embarqué en la aventura de hacerme militar profesional, dónde me adentré y preparé en el mundo de la cocina y el protocolo. Al finalizar esta etapa seguí formándome en este apasionante mundo que son los fogones y, durante dos años me preparé para ser técnico en dirección de cocina. Así que ahora quiero encaminar mi futuro compaginando mis dos pasiones: la enseñanza y la cocina, porque el éxito es la consecuencia directa de la perseverancia.